Este es el caso del los tiburones “Mako”, quienes suelen ser los más grandes de su especie y que son conocidos por la comunidad científica como “Isurus”. Dentro de los tiburones Mako hay dos subespecies, una de ellos es el Mako de aleta larga, que llega a medir hasta cuatro metros y medio de largo y que puede pesar hasta 170 kilos. La otra subespecie es el Mako de alerta corta que tiene la mitad de las dimensiones del de aleta larga. Recientemente un video de un Mako de aleta larga apareció en internet mostrando lo que había en su estómago y no podrás creer que fue… Un lobo marino embarazado. Ese descubrimiento rompió el corazón de todos los espectadores.
Era el cuerpo de un león marino casi entero que pesaba alrededor de 100 kilos. Al parecer el animal no lo había digerido bien porque las partes de la víctima eran fáciles de identificar, quizá tenía poco de haberlo cazado. Con este hallazgo, se pudo comprender mejor cómo funciona la cadena alimenticia y claro, si el tiburón se comió un enorme león marino ¿te imaginas lo que haría con un ser humano? Nos da escalofríos tan solo de imaginarlo.
Los tiburones Mako disfrutan saltar sobre el agua como las ballenas, se cree que es para atraer a sus víctimas. Además de su gran tamaño, también se les distingue por unos dientes muy afilados. Suele habitar las regiones de los Océanos Pacífico, Atlántico e Índico además de los mares Rojo y Mediterráneo ¿te atreverías a ver un tiburón Mako de cerca?
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